La ropa interior es ideal para el verano como para el invierno, ya sea para el esquí alpino, esquí de fondo, senderismo, alpinismo… y cualquier otra actividad outdoor. Cuando hace mucho frío, calienta adecuadamente y refresca el cuerpo cuando las condiciones se vuelven demasiado calientes. Es una segunda piel que regula la temperatura y evacua la transpiración en zonas estratégicas (espalda, axilas y pecho). También garantizan un ajuste óptimo, una libertad de movimiento y una larga duración de vida.
Las mallas de carreras, con gran elasticidad, moldean perfectamente las piernas y utilizan el sudor para enfriar eficazmente el cuerpo, y ayudarlo a ser más eficaz. Paralelamente, la compresión bien dosificada reduce las vibraciones musculares y protege los músculos y las articulaciones. Esta ropa interior responde particularmente a las exigencias de los corredores, optimiza la secuencia de los movimientos y estimula la circulación sanguínea. Así, los músculos están alimentados de mejor manera y por lo tanto, están más poderosos.