Los niños pueden iniciarse al esquí bastante temprano, pero antes de los 3 años, tiene que ser un juego practicado con sus padres, durante uno o dos descensos, para no cansarlos demasiado. La compra de esquí niño puede limitarse a los esquís para niño los más baratos.
Cuando un niño crece, se vuelve necesario comprar esquís adaptados a su talla y a su peso. Esos esquís son a menudo polivalentes y pueden servir para ambos pistas y freestyle. En cuanto al freeride, los esquís niño son apropiados, pero es mejor enseñarlos a los niños quedarse en las pistas. El sitio Snowleader permite conocer la disponibilidad de los esquís en tiempo real, y es posible tener una entrevista vía Skype con un consejero para tener informaciones en vivo.
Los esquís junior tienen que ser remplazados a menudo, porque a medida que crece el niño, se tienen que adaptar los esquís en longitud y tecnicidad. Los precios de compra son, con razón, más baratos que los esquís adulto, para permitir cambios más frecuentes. La compra de esquís polivalentes dará la oportunidad a los niños, curiosos y queriendo probar todo, de disfrutar en las pistas; y también poder iniciarse al freestyle.